Omar Bouvier, el guardián de los recuerdos pilarenses

Como anticuario, por sus manos pasaron muebles y objetos con mucha historia. Hoy, toda una generación disfruta con nostalgia las perlas del Pilar de antaño que atesora y comparte en las redes sociales.

Sociedad - Pilarenses con Historias 26/06/2021 Augusto Fernández Díaz

No pocas veces, el destino de una persona puede estar marcado por el de otra. A Omar Bouvier, el sello se lo colocó una profesora de la secundaria. Esa docente del Instituto Almafuerte imprimió en esa vida de adolescente un futuro estrechamente vinculado con la historia y su preservación. Tan fuerte fue ese lazo que, tras décadas de no saber uno del otro, con un exilio y un océano de por medio, volvieron a encontrarse. Cuando aún Omar no terminaba la escuela, María Oliveira César debió escapar del país perseguida por la dictadura de 1976. El destino: Francia. Él no supo más nada de ella, pero su trabajo estaba hecho; la pasión por la historia estaba sembrada. Más de cuarenta años después, la tecnología acortó las distancias y las redes sociales los volvieron a encontrar.

Y, casualidad o no, la historia y las redes son protagonistas de la vida de este pilarense nacido y criado. Nacido literalmente, porque dio su primera exhalación en una casona de la calle Pedro Lagrave, seis años antes que Juan Cirilo Sanguinetti cortara las cintas del primer centro de salud del pueblo. Luego se educó en colegios tradicionales del centro y se insertó en el mundo del trabajo, desde luego, rodeado de la idiosincrasia pilarense que modeló cada rincón de su personalidad. Hizo de todo: fabricó bijouterie de fantasía, elaboró flores artificiales y hasta manufacturó artículos de cotillón. Hasta que su destino entró a la cancha en el minuto indicado y le hizo abrir una casa de antigüedades. Ahí estaba todo, resumido en su día a día: la historia de Pilar, contada en cada mueble, en cada objeto que llegaba a sus manos y continuaba su camino, preservado, restaurado.

Así, a su negocio llegó una década atrás un libro de 1948 con datos sobre la historia de Pilar. Y ese fue el disparador para encarar un nuevo rol: el de anticuario virtual de los recuerdos de la sociedad pilarense. A partir de los hechos descritos en aquél libro, comenzó un trabajo de recolección y organización de material diverso sobre el Pilar del ayer, enfocado especialmente en principios y mediados del Siglo XX. Sus principales fuentes de información no fueron sino aquellas personas que compartieron su vida desde pequeño en ese Pilar donde aún predominaba el aire de pueblo. La nostalgia fue el principal combustible para que el proyecto fuera un éxito.

Omar encontró en Facebook -el ecosistema virtual más amigable para los +50- el ámbito ideal para que su iniciativa de revisión histórica de la sociedad pilarense floreciera ante el público. Y rápidamente se transformó en "rockstar"; del grupo Pilar en el Recuerdo, comunidad que ya roza los 13 mil integrantes. En cinco años y medio, Omar publicó 68 entregas sobre momentos, escenas y situaciones de la vida en Pilar de antaño, inspiradas cada una en una fotografía; cada imagen que fue llegando a sus manos desde otro pilarense, y cuya historia fue reconstruyendo con investigación y charlas. Un valioso material que, así como tuvo como punto de partida un libro, pueda terminar en otro, uno aún no editado.