Interrupción legal del embarazo, nuestra conquista

Hoy fue el día. Hoy las mujeres tenemos más derechos. Desde hoy y en adelante miles de mujeres, niñas, adolescentes y personas con capacidad de gestar podrán decidir interrumpir un embarazo no deseado en condiciones de equidad, asegurando las condiciones sanitarias y evitando la persecución legal. 

Hemos dado un gran paso, dejando huellas profundas, de los que vamos dando en el camino por la reivindicación de la igualdad de derechos entre hombres, mujeres y diversidades.  Se trata de la posibilidad de vivir en libertad, de acompañar los proyectos de vida personales, con un Estado presente, de dejar de lado la hipocresía y atender a lo que nos pasa como sociedad. 

Hoy, todo el día se teñirá de verde, como esa marea, que venía cubriendo las calles hasta lograr inundar el Congreso sin más demora. 

Las sensaciones se entrelazan, entre la emoción sin descanso, la fuerza y el nuevo impulso que nos colma de renovadas energías, la solidaridad intergénero que llamamos sororidad, pero también la serenidad y satisfacción ante la certeza que estamos construyendo un mundo más justo de cara a las nuevas generaciones, y que no deja de imponerse.

Tal vez, un poco más adelante, podamos dimensionar la magnitud de lo que estamos viviendo, de lo ganado con el esfuerzo de tantas, de tantos, durante mucho tiempo. Hemos calado hondo, y estamos construyendo las bases, para fortalecernos y seguir creciendo. Pudimos sostener la lucha colectiva, ejercitar el compromiso conjunto, del que continuaremos teniendo que valernos, sin distracciones. Amanecimos. Hoy amanecimos mejores. 

Luego de haber vivido un año tan adverso, podemos enorgullecernos de que lo estamos concluyendo con Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo sancionada, así como, la movilidad jubilatoria. También, con las primeras dosis de la vacuna contra el Covid 19 colocada al personal esencial que cuida la salud de todos y todas los argentinos, y con el internet, telefonía celular y cable, que tanto necesitamos en estas épocas, como servicios públicos.  

Nos queda un desafío, la aplicación e implementación de la Ley, que tanto el Estado, en sus tres niveles de gobierno y los distintos poderes, como cada una y cada uno que militamos, desde nuestro rol y en el territorio debemos garantizar, con el mismo compromiso y el mismo ímpetu con el que se logró su sanción.

Seguimos con la voz en alto, la mirada atenta hacia las compañeras y el recorrido colectivo de este verdadero movimiento feminista, que no se detiene y que además se agiganta, que sabe que es tiempo, que es nuestro tiempo de seguir adelante, sin detenernos. 

Es Ley, Aborto Legal Seguro y Gratuito, La Patria Es La Otra.