Gustavo Bachi, Tangos con Sentimiento Pilarense 🎤

Radicado hace algunos años en la localidad cordobesa de Alta Gracia, Bachi volvió a Pilar para protagonizar una gira zonal en la que presenta su disco "Lo que yo siento", bautizado en honor a su padre José Adhemar  Bacci, donde incursiona en la música ciudadana.

En el show, Bachi repasó buena parte de su trayectoria, además de interpretar canciones incluidas en el material discográfico que lo trajo nuevamente a Pilar. Es que, de hecho, la mayor parte del camino artístico recorrido tiene como raíces a nuestro distrito, de la mano de una familia -los Bacci- íntimamente relacionados con la historia musical pilarense.

"Ya de alumno en el Instituto Verbo Divino integraba el Coro, y así fueron mis comienzos musicales. A temprana edad visité distintos escenarios de la provincia de Buenos Aires y la Capital Federal con el género folklórico", recordó Bachi.

Luego llegó el turno de su primer dúo, junto a Adalberto Lavallén, que luego se transformó en el Pilar Trío al incorporarse Luis Piccoli.

Pero sin dudas fue junto a su padre, el popular "Kubala", cuando quedó inscripto en los libros de la cultural local al componer a seis manos (también con Lavallén) y ser el primer intérprete de la emblemática "Zamba del Pilar".

"Estoy agradecido a todos los músicos pilarenses que estuvieron a mi lado en este hermoso camino del arte y al público por acompañarme siempre, en especial en esta noche tan emotiva en la que estoy de regreso con mi música en mi ciudad natal después de veinte años", sostuvo al recordar sus inicios durante el show, que además contó con la danza en vivo de Melina Foster y Juan Bonanni.

Del folklore, Bachi pasó al melódico y comenzó a tener sus primeros romances con el dos por cuatro acompañado por su hermano Héctor Bacci, con quien formó el grupo La Ganzúa, que llegó a presentarse en el Congreso de la Nación.

Ya consolidado como artista tanguero, encontró en Córdoba su rincón en el mundo, pero siempre teniendo a Pilar como ese lugar al que siempre volver para sentir en cada escenario ese irremplazable calor de hogar.